Luego de haber tomado una decisión, lo primordial es actuar de manera cónsona, pero esta situación lleva implícito, hacerlo siempre con una actitud positiva.
La
actitud se relaciona con la posibilidad de alcanzar nuestras metas, el
éxito y la prosperidad. Es la posición con la que afrontamos y/o
respondemos a cada situación en la vida, además involucra nuestros
pensamientos y creencias particulares. Podemos hablar de actitud
positiva cuando tenemos confianza en nosotros mismos para resolver
satisfactoriamente situaciones de nuestra vida.
La
actitud, como forma de proceder del ser humano, influye o afecta
nuestro estado de ánimo, nuestras acciones, nuestra salud, nuestra
calidad de vida y hasta nuestra felicidad. Que ésta, sea positiva o
negativa, dependerá en gran parte de lo que vivimos de niños, y de todas
aquellas personas significativas que nos rodeaban. Sea cual sea,
nuestra actitud al día de hoy, debemos estar claros que debe ser
siempre la positiva, ya que esta es la fuerza que nos impulsa y nos
motiva a lograr lo que deseamos, a pesar de los obstáculos que
enfrentamos.
La
actitud positiva, debe estar presente en nuestros gestos, en lo que
hablamos, en nuestras emociones, debes levantarte siempre de forma
entusiasta, porque el día esta lleno de situaciones adversas, pero eres
tú, quien hará verlo de manera maravillosa si solo te enfocas en lo
mejor de cada día.
¿Cómo hacerlo?
- No podemos cambiar el pasado, pero sí, lo que sentimos respecto a él y la forma cómo nos afecta en estos momentos.
-Cree
en tí, desarrolla el sentido de seguridad y confianza sobre tu persona y
sobre lo que te rodea, si crees merecer una vida mejor y tienes la
actitud correcta, empezarás a proyectar una nueva realidad, la que en tu
mente has venido construyendo.
-Aparta
tu atención de las cosas negativas, que día a día se nos presentan, no
te enganches, solo dedícate y atiende las cosas positivas que suceden a
tu alrededor, esto hará mejorar tu estado de ánimo, y recuperar las
ganas de hacer las cosas con dedicación y empeño.
-En
la búsqueda de tus grandes sueños, tus anheladas metas, establece
pequeños objetivos diarios, ser cortés y amable con quien se cruce en tu
camino, hacer las cosas lo mejor posible, ayudar a quien lo nececite,
hacer la obra diaria de caridad te hará sentir mejor persona, mejor ser
humano, mas confiado y seguro de lograr cosas mayores.
-Parecerá
tonto, pero la mayoría de las personas a diario, reflejan en su cara lo
negativo que les pasa, ilumina tu rostro con una sonrisa, cada vez que
te encuentres con alguien, además de hacerlo un hábito, irradiarás lo
que tu vida necesita recibir, y poco a poco, tu entorno se amoldará y
preparará para que, en el momento que DIOS así lo tenga planificado, tú
recibas la bendición de haber alcanzado una de tus grandes metas, eso es
lo que dicen por allí: “El universo conspira para que tu logres lo que
te propones”.
-A
tu alrededor hay elementos positivos y negativos, recuerda: “¿lo hago o
no lo hago?”, es tu decisión, cuál de ellos dejarás que te afecte, nada
debe alterar tu entusiasmo y tu confianza, no te cambies al bando de
quienes difunden cosas negativas, (que difícil es no hacerlo), lucha
para que tu entorno, sobre todo el mas cercano, tu casa, sea un lugar
donde se pueda descansar y estar feliz y sólo se maneje la idea del
optimismo y las ganas de vivir. Todo esto se logra, si haces que tu
ACTITUD sea siempre positiva.
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